Tristan Perich

De musiki
Tristan Perich
NombreTristan Perich
Año1982
ProfesiónCompositor, artista sonoro y matemático
Obra paradigmáticaOctave
Descriptoresetiquetas separadas por comas etiquetas separadas por comas
Audio<embed>links al sonido de la obra</embed>
Video

Provided ID could not be validated.




Biografía

Tristan Perich nació en Nueva York (Estados Unidos) en el año 1982. Estudió matemáticas, música e informática en la Universidad de Columbia (Nueva York), materias sobre las que se sustenta toda su producción artística, y completó un master del programa de Telecomunicaciones Interactivas en The Tisch School of the Arts en la Universidad de Nueva York. Realizó una serie de composiciones, así como instalaciones de arte sonoro centrado en el sonido electrónico de un bit (unidad mínima de información), que Perich describe como música que no tiene más de un bit de información que se está reproduciendo en un momento dado. Es considerado uno de los artistas sonoros más innovadores de la actualidad, según el Museo de Arte Contemporáneo de Nueva York (MOMA). Ha expuesto en espacios como Bitforms (Nueva York), Mikrogalleriet (Copenhagen), Museo Caradente (Spoleto, Italia), The Adisson Gallery (Massachusetts), Katonah Museum (Nueva York), Monster Truck (Dublín) y Leap (Berlín).

Trabajos sonoros

  • 1-Bit Music (2004), el primer álbum editado en formato de microchip, explora los fundamentos del sonido digital. Un circuito electrónico esta montado dentro una caja CD con una toma para auriculares en su lado. El aparato repite 40 minutos de música electrónica low-fi (de baja frecuencia) y 1-bit, la representación digital de audio de más baja frecuencia posible.
  • 1-Bit Symphony (2010), es una composición electrónica en cinco movimientos desarrollada mediante programación y circuito integrado. Aunque se aloja en un CD, no se trata de una grabación en el sentido tradicional, sino de una activación en tiempo real del código desarrollado por el artista. Un circuito electrónico completo toca la música a través de una toma de auriculares que se conecta a la misma caja. Trata la electricidad como un medio sónico. Los impulsos eléctricos de encendido y apagado enviados por el microchip hasta el altavoz, expresan los datos en sonido, esquivando la capa de traslación inherente a los
    conversores digital-analógico de elevada tasa de bits.

Instalaciones de audio

Interval Studies

Es un acercamiento formal a los intervalos musicales como un continuo denso de microtonos , expresado en masa como frecuencias discretas 1-bit distribuidas sobre 1.500 altavoces individuales. Cada despliegue de altavoces esta albergado por un cuerpo de aluminio y subdividido en una cuadrícula. Una acumulación de frecuencias derivadas matemáticamente llena la superficie de la escultura, que se comporta como ruido blanco sentido a distancia. De cerca, la sensación musical tonal se hace audible mientras cada altavoz suena con una frecuencia distinta.

Microtonal Wall

Es una instalación que consta de 1.500 altavoces de audio sobre un panel de aluminio de 7,5 metros. Cada altavoz emite un solo sonido, resultado de dividir en microtonos seis octavas en un continuo de frecuencias individuales.
 El espectador experimenta espacialmente la transición del ruido blanco al tono cuando se acerca a la obra, y en última instancia, a la resolución de un único tono, cuando llega a poner su oreja sobre uno de los altavoces. Esta obra explora las limitaciones finitas de los medios digitales, y alude al infinito a través de una estructura repetida.


Archivo:Wall.jpg

Octave

Consiste en 300 altavoces haciendo sonar 300 frecuencias distintas, distribuidas a distancias iguales y en orden ascendente a lo largo de una octava de Do a Do. Cada uno de los 12 paneles en que se divide la pieza comprende un semitono: el altavoz inferior izquierdo del primer panel hace sonar un Do, el del segundo panel un Do#, el del tercero un Re, etc. A partir del altavoz inferior izquierdo de cada panel, las frecuencias van aumentando, a razón de una vigésimo quinta parte de un semitono, de cada altavoz al inmediatamente superior. Desde el altavoz superior de cada columna, la progresión continúa en el altavoz inferior de la columna siguiente. Aunque cada altavoz emite un sonido de una frecuencia constante, lo que podríamos llamar un tono puro, la impresión que produce la pieza desde cierta distancia es la de un ruido cercano al ruido blanco. Esta impresión ruidosa resulta de la superposición de tonos tan cercanos: la pieza consiste en una especie de cúmulo muy denso. Pero la impresión de ruido procede también de cada altavoz por separado: si acercamos la oreja a uno de ellos, el sonido parece distorsionado. Esto se debe a que los altavoces emiten ondas cuadradas, las frecuencias de 1-bit características de la obra de Tristan Perich. Estas ondas resultan de la traducción directa de la información procedente de un circuito electrónico, cadenas formadas por las cifras 0 y 1, al movimiento de la membrana del altavoz. El 0 y el 1 corresponden a las dos posiciones extremas de la membrana, y el paso de una a la otra, según se van sucediendo los ceros y los unos, se produce de forma brusca. Si el paso de 0 a 1 se da 440 veces por minuto, el sonido resultante, por más que nos parezca distorsionado, es la nota La perfectamente afinada. El sonido de cada altavoz nos parece distorsionado pero, en rigor, no lo está en absoluto. Desde el punto de vista del circuito electrónico, el sonido es puro. La impresión ruidosa resulta de la distancia que separa el funcionamiento de un circuito del funcionamiento de nuestro oído; es la rugosidad, la fricción, que hace audible la distancia entre dos mundos, entre dos lenguajes no del todo compatibles.